5.4. Atención de la salud mental y apoyo psicosocial

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atencion salud mentalLas situaciones desencadenadas en las emergencias y los desastres constituyen una perturbación psicosocial que llegan a sobrepasar la capacidad de manejo o afrontamiento de la población afectada. El personal de salud, los grupos de búsqueda y rescate, el personal de socorro, los voluntarios y otras personas que participan en la asistencia se ve expuestos no solo a los efectos que ocasiona un desastre sino también a una enorme carga emocional en el desarrollo de sus tareas.

De esta manera, las acciones de atención de la salud mental deben estar dirigidas tanto a la población afectada como al personal mismo que apoya las actividades de asistencia. Las tareas son diversas y deben desarrollarse en coordinación con múltiples actores, incluyendo a la población misma. Las líneas generales de acción de un plan de atención de salud mental en emergencias son:

  • Evaluación preliminar rápida de los daños y las necesidades en salud mental para determinar la estrategia específica de intervención.
  • Implementar medidas de intervención, las cuales pueden ser aplicadas no solo por el personal especializado, sino también por los trabajadores de atención primaria en salud, los voluntarios, el personal socorrista y de ayuda humanitaria y agentes comunitarios quienes tienen contacto directo con la población y pueden prestar la primera ayuda psicológica en el período crítico.
  • Atención priorizada a grupos de riesgo o alta vulnerabilidad, y población con necesidades especiales.
  • Capacitación sobre principios básicos de atención psicosocial, intervención en crisis y primera ayuda emocional para quienes tienen contacto cercano con las víctimas y sobrevivientes.
  • Y educación para la salud: Proporcionar a la población afectada información y orientación sobre la emergencia, el contexto, las actividades de ayuda, así como sobre las medidas que deben adoptar para su auto protección, lo cual es es esencial para fomentar la tranquilidad y reducir el miedo y la aflicción.
  • Coordinación intersectorial e interinstitucional: la implementación de estas actividades requieren de la participación activa de todos los entes responsables relacionados
  • Proveer servicios de salud para atender las necesidades de las personas afectadas, incluyendo además consideraciones de índole psicológica y social en la provisión de atención general de salud
  • Prevenir y atender los problemas de salud mental y bienestar psicosocial del personal y voluntarios.
  • Organización comunitaria, capacitación de agentes comunitarios, participación social y fomento de la autorresponsabilidad
  • Sistema de registro de la información, indicadores y seguimiento
  • Tomar en consideración las necesidades sicosociales y el respeto a las prácticas culturales de la población en la planificación de cada una de las diversas actividades de asistencia (albergues, provisión de alimentos, abastecimiento de agua y saneamiento.
  • Coherencia de las acciones de salud mental con el Plan de Emergencia del Sector y el Estado.

La Guía práctica de salud mental en situaciones de desastre y el manual de Protección de la salud mental en situaciones de desastres y emergencias de OPS son excelentes fuentes de referencias prácticas de los procedimientos para la identificación y manejo de las diferentes manifestaciones psicosociales de las víctimas de los desastres.

Orientaciones específicas para equipos de respuesta y otro personal en el terreno pueden ser encontradas en Psychological first aid: Guide for field workers y en Apoyo psicosocial en emergencias humanitarias y desastres: Guía para equipos de respuesta.

La Guía del IASC sobre Salud Mental y Apoyo Psicosocial en Emergencias Humanitarias y Catástrofes aporta lineamientos sobre prácticas recomendables para brindar apoyo social para proteger y apoyar la salud mental y el bienestar psicosocial en la etapa inicial de una emergencia.